
La moda italiana enfrenta su futuro entre nuevos desafíos y la celebración de su legado
En un momento crucial para la industria, la Semana de la Moda de Milán se prepara para su próxima edición mientras suenan las alarmas por la creciente competencia asiática. Al mismo tiempo, una importante exposición rinde homenaje al apogeo del “Made in Italy”, recordando las raíces de su poder creativo.
La advertencia: “Estamos bajo ataque”
“En una época en la que la moda italiana está siendo fuertemente atacada, no es positivo que haya divisiones internas”. Con estas palabras contundentes, Carlo Capasa, presidente de la Camera Nazionale della Moda, hizo un llamado a la unidad durante la rueda de prensa de presentación de la Semana de la Moda de Milán (23 – 29 de septiembre). Invitó al gobierno, a las instituciones y a los periodistas a “hacer sistema” y trabajar en conjunto.
“Todos deben comprometerse. La moda en estos momentos necesita la energía de todos, porque otros países están presionando con mucha fuerza”, afirmó Capasa. Su preocupación se centra especialmente en la competencia de China e India, naciones que “no solo nos están invadiendo con el super fast fashion, sino que también están invirtiendo en productos de alta calidad, un terreno en el que hasta ayer éramos los líderes indiscutibles”.
Las cifras confirman la gravedad de la situación. Matteo Zoppas, presidente de la agencia ICE, reconoció que Capasa fue el primero en advertir sobre la crisis que se avecinaba para el sector, que es el segundo más importante de la manufactura italiana y representa el 5.5% del PIB. “La facturación de 100 mil millones de euros ha caído a 92 mil millones, con una pérdida del 4% en 2025 que se suma al 5.4% de 2024. Esto significa una clara disminución de las exportaciones y un aumento de las importaciones, precisamente desde China e India”.
Una pasarela de debuts y homenajes
La conferencia de prensa comenzó con un minuto de silencio en memoria del legendario Giorgio Armani. Se confirmó que los dos grandes eventos que el diseñador supervisó personalmente —el desfile y la exposición por los 50 años de su marca— se llevarán a cabo como estaba previsto el 28 de septiembre en la Pinacoteca di Brera. “Él nos enseñó cómo reaccionar ante estas situaciones”, insistió Capasa.
La semana de la moda también atraerá la atención internacional con importantes debuts en las direcciones creativas: Louise Trotter para Bottega Veneta, Simone Belotti en Jil Sander y Demna, quien revelará su esperada primera colección para Gucci el 23 de septiembre. Además, Dario Vitale presentará su propuesta para Versace a través de un evento especial en lugar de un desfile. En total, el calendario incluye 54 desfiles presenciales, 4 digitales y más de 80 presentaciones, fiestas y eventos.
Entre los nuevos talentos que debutan en la pasarela se encuentran el diseñador indio Dhruv Kapoor y KNWLS, la marca londinense de Knowles y Arsenault. Sin embargo, se notará la ausencia de firmas como Bally, Dsquared2 y Marni. Por otro lado, regresan al calendario oficial Boss, Calcaterra y Stella Jean.
Un viaje al origen del estilo italiano
Mientras la industria mira hacia el futuro, una excepcional exposición invita a reflexionar sobre el pasado glorioso que consolidó el “Made in Italy”. La muestra “Moda y publicidad en Italia 1950-2000”, que se presenta en la Fundación Magnani Rocca, ofrece un recorrido inédito a través de medio siglo de historia, mostrando cómo la comunicación y el diseño se unieron para forjar una identidad cultural reconocida en todo el mundo.
Con más de trescientas piezas, que incluyen afiches, revistas, comerciales, fotografías e incluso las icónicas calcomanías de Fiorucci, la exposición narra la evolución del imaginario colectivo desde la posguerra hasta los inicios del nuevo milenio. Es un viaje que destaca a los protagonistas de esa era dorada: Armani, Gucci, Versace, Fendi, Dolce & Gabbana, Valentino y muchos otros.
La creatividad como motor y defensa
La exhibición resalta el trabajo de grandes maestros de la fotografía como Giampaolo Barbieri y Giovanni Gastel, junto a las ilustraciones de René Gruau y el enfoque disruptivo de Oliviero Toscani. Estas obras demuestran cómo la moda se convirtió en una poderosa herramienta de comunicación, definiéndose como un lenguaje del cuerpo y un reflejo de los cambios sociales y económicos del país.
Este recordatorio del poder de la originalidad resuena con el mensaje de Carlo Capasa. “La moda debe volver a empezar desde la creatividad”, subrayó. “Todas las marcas de super fast fashion se inspiran en nuestros diseñadores, pero nosotros somos los únicos que invertimos en la originalidad. Debemos reforzar este aspecto y reconectar con la gente”.
En esta misma línea, el 27 de septiembre regresarán al Teatro alla Scala los Green Carpet Awards, premios que reconocen a las empresas destacadas en sostenibilidad, otro pilar del orgullo milanés. Así, entre la celebración de su herencia y la urgencia de innovar, la moda italiana se prepara para defender su lugar en el escenario global.